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Uno de los vehículos robados. Guardia Civil
La Guardia Civil ha identificado a un vecino de Vigo, de 52 años, al que se investiga por su presunta vinculación con 54 robos cometidos en otros tantos vehículos de Pontecesures, Valga, Lalín y Monforte.
Esta vez está relacionado con una decena de robos en las dos primeras localidades. Pero se da la circunstancia de que este mismo hombre tiene múltiples antecedentes policiales por hechos similares, de ahí que ya fuera detenido en 2016 en la localidad pontecesureña, en aquella ocasión relacionado con otros 44 robos similares cometidos tanto allí como en Lalín y Monforte de Lemos en marzo de 2016 y noviembre y diciembre de 2015.
Seis años después, el equipo de investigación de la Guardia Civil de Vilagarcía de Arousa, en colaboración con efectivos del puesto de Valga, dio con el paradero de este vigués y lo relacionó con la decena de robos cometidos el pasado mes de mayo en los municipios del Ullán.
De los hechos investigados se desprende que en todos los casos habría actuado con el mismo modus operandi, rompiendo el cristal de la ventanilla de una de las puertas con un destornillador, para apropiarse de los objetos de valor que pudiera encontrar en su interior.
Se trata de robos en vehículos estacionados en garajes comunitarios de cinco edificios, y si bien el valor de lo sustraído “no es muy elevado”, según relata el propio instituto armado, “los daños materiales causados superan los mil euros”.
Un vehículo de la Guardia Civil, en Pontecesures. FdV
En esta ocasión fue localizado en Vigo, “donde se le notificó su condición penal de investigado como presunto autor de diez delitos de robo y otro de daños materiales causados en el ascensor de uno de los edificios”.
Las diligencias instruidas por la Guardia Civil fueron entregadas en el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de Caldas de Reis, donde deberá comparecer cuando sea requerido por la autoridad judicial.
Puede recordarse que, tras la detención del vigués en 2016, se explicó desde fuentes policiales que estaba detrás de una oleada de robos en vehículos en los que también causó daños materiales valorados en más de 8.000 euros, dada la rotura de los cristales de las ventanillas de los 44 vehículos atacados y otros desperfectos sufridos en algunas de las puertas de los garajes donde estaban estacionados.
En aquella operación, por cierto, la Guardia Civil también había detenido a dos jóvenes por sendos delitos de receptación, ya que habrían adquirido y utilizado teléfonos móviles que, presuntamente, habían sido sustraídos por el vigués.
Dicha investigación había comenzado a raíz de los robos en el interior de seis vehículos en Pontecesures durante la madrugada del 6 de marzo de 2016.
Todos los coches estaban aparcados en garajes comunitarios de distintos edificios, que es lo mismo que ha sucedido en los diez nuevos robos por los que se le investiga ahora.
Había sido el rastreo electrónico de uno de los teléfonos lo que permitió a los investigadores conocer la identidad de tres jóvenes que lo habían estado utilizando desde que fue sustraído.
Aquello condujo a los agentes hasta el vigués, quien en el momento de la detención (efectuada en junio de 2016), portaba dos móviles sustraídos en sendos vehículos la noche del 20 de noviembre de 2015 en Monforte de Lemos.
Como ya se explicó entonces, aquella misma madrugada se habían cometido 17 robos en distintos coches y garajes de la localidad lucense.
Asimismo, en poder de otro de los jóvenes identificados entonces se localizó otro teléfono que le había facilitado el detenido y había sido sustraído en el interior de un vehículo en otra oleada de robos (21) cometidos en la noche del 19 de diciembre de 2015 en otros tantos coches estacionados en garajes de Lalín.
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